lunes, 7 de julio de 2008

En el futuro habrá pocos trasplantes, pero más eficaces, fáciles e inocuos

Fuente: La Voz de Galicia.

El futuro de los trasplantes es que no habrá trasplantes. Al menos, no como ahora, porque la mayor parte de las enfermedades se atajarán con células madre antes de que deterioren tanto un órgano que necesite un trasplante. Eso sí, los que haya serán muy eficaces, casi inocuos para el receptor y de cualquier parte del cuerpo.

En las últimas semanas se ha hablado de trasplantes entre personas de grupos sanguíneos diferentes, o de cara, o de ambas manos... ¿cuál es el límite? Antón Fernández, coordinador del programa de trasplantes del Hospital Juan Canalejo, de A Coruña, cree que el trasplante de órgano como hoy lo concebimos terminará por ser residual.

El motivo es que será la última opción en una medicina con muchas otras alternativas. La primera, sin duda, la derivada del uso de células madre. En un futuro perfecto se podrá extraer de un enfermo unas células de su piel (por ejemplo), convertirlas en células madre, ponerlas en una matriz para cultivarlas y cuando ya sean muchas, inyectarlas en el órgano dañado para que por sí solas lo regeneren.

Una vez que el xenotrasplante (de animales a hombres) no da resultados (rechazos y contagios de enfermedades), la apuesta es clara. El Canalejo comenzará en breve un programa para cultivar queratinocitos (células de la epidermis) para después aplicarlos a las pieles de los quemados. En Alemania se están implantando en uno con hepatocitos (células del hígado) llegados de toda Europa para niños con males congénitos.

Artificiales

Si esto falla, el siguiente paso será el órgano artificial. Con el corazón ya se ha conseguido algo (a Galicia podría venir en unos pocos años), pero se trata de un aparato de plástico. Otra cosa es crear algo más biológico: «Se está estudiando mucho, aunque a mí se me hace muy raro que se pueda crear un pulmón entero», dice Fernández. Parece más fácil que la ciencia dé con la manera de dar forma con algún polímero a esos cultivos de células madre que crecen en los laboratorios.

Solo cuando todo falle llegará el turno de los donantes.

No hay comentarios: