miércoles, 4 de marzo de 2009

Presentan una "casa inteligente" para personas con demencia

Fuente: adn.

Voces que advierten de forma automática de que no es hora de levantarse todavía, cocinas de gas que se apagan al detectar humo o grifos que cortan el agua solos al comprobar que no hay nadie utilizándolos son algunos de los equipamientos diseñados específicamente para personas que sufren demencia.

Con el objetivo de crear una especie de "casa inteligente", investigadores de la Universidad de Bath (Inglaterra), en colaboración con el Consejo de Investigaciones en Ciencias Físicas e Ingeniería del Reino Unido, presentaron hoy algunos de sus avances en la feria "Pioneros '09", que tiene lugar estos días en Londres.

Estas primeras novedades ya han sido implantadas en dos hogares ingleses en los que viven personas que padecen algún tipo de demencia.

Quienes sufren esta enfermedad -afecta sobre todo a personas de avanzada edad- se caracterizan por sufrir una fuerte tendencia hacia el olvido y el despiste, lo que hace disminuir su autoestima y en ocasiones les hace caer también en situaciones peligrosas para la salud.

Uno de los efectos más habituales es perder la noción de la noche y el día, para lo que este grupo de investigadores ha ideado una cama en la que hay instalados varios sensores que activan la luz cuando el individuo se levanta en medio de la noche.

En ese momento, una voz también informa de forma automática de que todavía no es hora de levantarse.

Otro de los mecanismos proyectados para equipar esta "casa inteligente" es un grifo que detecta cuándo hay movimiento, por lo que el agua deja de salir aunque al enfermo se le olvide cerrarlo.

En opinión de sus creadores, este mecanismo es especialmente útil porque cuando el inquilino vuelve al baño no se encuentra con el grifo abierto, un detalle que transmitía inquietud a la persona con demencia y contribuía a minar su autoestima.

Además, también presentaron una cocina con gas que se apaga automáticamente al detectar humo, como medida de seguridad.

Al dejar de funcionar, un letrero situado en la cocina se ilumina avisando de que está apagada, al mismo tiempo que se envía un mensaje al móvil del paciente para advertirle por si se encuentra en otra habitación.

El coste de la instalación de estos equipos supera los 15.000 euros, aunque según sus creadores el precio podría bajar una vez que se comercialicen, ya que por el momento "es sólo un prototipo".

La feria "Pioneros '09" también ha servido para presentar otras novedades tecnológicas en el campo de la salud, como unos sensores que se colocan en muñeca, codo y pecho para monitorizar los movimientos de pacientes que han sufrido algún tipo de derrame.

De esta forma se les puede ayudar a realizar sus ejercicios de rehabilitación en casa con la única ayuda de un ordenador y de un software que está desarrollando la compañía Philips.

Otro de los aparatos presentados hoy es un móvil especial para enfermos en las primeras fases de Alzheimer, que transmite al paciente una serie de mensajes que le recuerdan lo que debe hacer durante el día y le ayudan a no depender tanto de otros familiares.

¿Cómo romper la resistencia de las bacterias?

Fuente: Publico.

La batalla contra las infecciones bacterianas parece haberse recrudecido en la última década. Las bacterias, organismos con una gran capacidad adaptativa, están aprendiendo a resistir a los nuevos fármacos y, sólo en España, las infecciones adquiridas en el hospital acabaron en 2006 con la vida de 5.600 personas.

Las farmacéuticas están estancadas en este campo. Utilizan fórmulas renovadas pero basadas en modelos conocidos en los que pequeñas moléculas inhiben el crecimiento bacteriano. "Los nuevos fármacos son transformaciones de viejas fórmulas, pero con cada vez más espectros de actuación. Las bacterias se están volviendo resistentes, hay infecciones a las que los actuales sistemas de inhibición no les afectan", contaba recientemente en Science el director de Microbiología del laboratorio GSK, David Payne.

Por esta razón diferentes grupos en todo el mundo se esfuerzan por desarrollar fármacos más sofisticados e incluso revolucionarios. Es el caso del investigador del Begbroke Science Park (Reino Unido) David Haydon, que trata de atacar al andamio que proporciona la forma y estabilidad a las células bacterianas. De esta forma, al atacar a la propia estructura se detendría la infección, ya que las células son incapaces de proliferar en los diferentes tejidos. Por su parte, el grupo del microbiólogo de la Universidad de Texas David Rasko intenta detener las enzimas que actúan dentro de las células, lo que ralentizaría el crecimiento bacteriano hasta detenerlo.

Otro grupo del Centro de Investigación Biotecnológica de la Universidad de Toyama (Japón) ha analizado el genoma de algunas de las bacterias fuente de enfermedades. "Así podemos seleccionar los genes responsables de la identificación de los organismos que van a infectar", comenta Tomoshige Hiratsuka, líder del grupo que explica que, por esa vía, se podría crear un antibiótico específico para cada género bacteriano, que "confundiera" al invasor.

Estas tres nuevas formas de atacar el problema, aunque existen, son todavía muy teóricas. El interés de la industria farmacéutica será vital para su desarrollo.

Llega el coche eléctrico. ¿Dónde lo enchufamos?

Fuente: El Pais.

Se recarga por la noche, como un teléfono móvil, apenas gasta 1,5 euros por cada 100 kilómetros, no sale humo del tubo de escape y su conductor se libra de la vibración y los ruidos de los motores actuales. Los coches eléctricos no son ciencia ficción: llegarán a Europa el año que viene. Pero lo que falta, precisamente, es toda una red de enchufes y postes eléctricos que proporcionen autonomía a los vehículos. En las casas, en las empresas, en las calles.

Tras varios intentos fallidos, las industrias del automóvil y de la energía aúnan fuerzas para hacer viable, esta vez sí, el coche más limpio. Si se tiene en cuenta que el Gobierno prevé que circule un millón de coches eléctricos dentro de cinco años, el desafío es mayúsculo. Experiencias pioneras en Londres, Israel o California están enseñando el camino, no exento de tropiezos.

Las dudas son muchas. ¿Habrá energía suficiente? El consumo eléctrico aumentará, pero los expertos coinciden en que, al menos a medio plazo, es posible funcionar con las centrales existentes si se produce un cambio estructural. El éxito parece residir en las smart grids, o redes inteligentes, que conformarán un sistema de gestión de electricidad activo y capaz de interactuar con el cliente. Es decir, redes que permitan que los vehículos aparcados vendan a la red energía en los momentos en que el sistema la necesite.

La cátedra BP de Desarrollo Sostenible de la Universidad Pontificia de Comillas ha elaborado un documento en el que se analiza el impacto de la implantación del coche eléctrico. El documento hace hincapié en estas redes inteligentes: "Sistemas que permitan una relación bidireccional en los flujos entre la red y los coches, y que faciliten la transmisión de las señales necesarias para que los coches se conecten a la red en los períodos adecuados para el correcto funcionamiento de la red eléctrica".

Por ello, a medio plazo, el coche eléctrico puede funcionar (con condiciones). Las eléctricas coinciden en que los vehículos tendrán que recargarse principalmente por la noche, en las llamadas horas valle, donde existe menor consumo eléctrico, para facilitar la operatividad del sistema. La energía eólica, en la que España es líder, funciona dependiendo de las circunstancias meteorológicas y es precisamente por la noche cuando suele haber más viento. "Ha llegado a aportar más del 40% de la energía total, pero en otras ocasiones representa menos del 1%", dice Luis Atienza, presidente de Red Eléctrica Española (REE). A veces es necesario desconectar los molinos porque sobra producción; hasta el 37% de ellos tuvo que parar un domingo del pasado mes de noviembre.

Con el coche eléctrico se va a ganar en eficiencia y sostenibilidad. En eficiencia, porque estos nuevos vehículos rinden al 80% o 90%, mientras que la eficacia de un motor de combustión se sitúa en torno al 20%. Por otro lado, la energía total consumida por los vehículos proviene en el 98% de productos derivados del petróleo, por lo que el ahorro real irá en función de la procedencia de la electricidad que, según los expertos, podría ser renovable en mayor medida. Atienza apunta, en este sentido, el posible aprovechamiento de las renovables: "El parque automovilístico eléctrico contribuirá a absorber la producción energética renovable que actualmente no encaja en el sistema. Crearlo no es tanto un reto como una oportunidad para que, como líderes internacionales de energías renovables, podamos facilitar la operatividad del sistema".

El optimismo de Atienza no es descabellado, pero dar el salto a la gestión inteligente de la energía será un proceso complejo. Según el presidente de REE habrá que esperar unos 10 años para que el suministro pueda ser bidireccional. No obstante, con el número de coches que se prevé que vayan incorporándose al mercado, el presidente de REE cree que será suficiente con "reforzar el sistema eléctrico en algunas zonas y adaptar sobre todo los puntos de suministro; enchufes y postes, y realizar la transmisión de forma inteligente".

Desde el Ministerio de Industria también se confía en la capacidad energética de España. "Es posible producir 80.000 megavatios y el pico está en 45.000", dice un portavoz del departamento. Aunque estos datos son relativos porque, dado que no todas las centrales rinden de forma continuada, es necesario tener instalada una sobrecapacidad para poder atender a la demanda. No obstante, Pedro Linares, ingeniero de la cátedra de Desarrollo Sostenible, también descarta que pueda producirse un colapso en el sistema energético: "Las previsiones que existen de aquí a 2014 supondrían un aumento de la demanda del 3% o 4%. Esto es lo que suele crecer anualmente, por lo que no sería significativo para el sistema". Lo que será necesario es mejorar el rendimiento, poniendo el mayor énfasis en las energías renovables, que España se ha propuesto aumentar hasta llegar al 20% de la energía total en 2020, objetivo de la Unión Europea.

Otra cuestión que preocupa al sector es la forma de abastecimiento de energía en los coches. Tras años de estudio, la tecnología de las baterías de ion-litio de los teléfonos móviles se perfila como la alternativa más eficaz para recargar los vehículos del futuro, por su menor tamaño y mayor capacidad. Aunque las baterías resultan aún muy caras, y más cuanta más autonomía tenga el coche, el precio por kilómetro rodado es mucho menor. Según José Santamarta, que ha asesorado al Ministerio de Medio Ambiente, cargar el coche de noche costará, aproximadamente, 1,5 euros cada 100 kilómetros, mientras que en los automóviles de gasolina el importe está en torno a los seis o siete euros.

Las compañías automovilísticas tienen que decidir entre dos posibilidades para que los vehículos se carguen en la calle: una, rellenar sus baterías en puntos destinados a ello, y otra, que directamente cambien su batería por otra cargada. En España, todo apunta a que los coches optarán por el primer modelo. Según el informe de la cátedra BP, si se opta por la sustitución de baterías no sería necesario un gran cambio en la regulación del sector, al contrario del procedimiento de recarga, para el que habría que dotar de mayor infraestructura al sistema y "dar señales adecuadas sobre cuándo es conveniente cargar el coche y, más aún, si el flujo va a ser recíproco", señala el documento, que concluye que "el sector eléctrico está plenamente capacitado para afrontar cualquier cambio de paradigma regulatorio".

Uno de los principales retos en este sentido pasa por la estandarización de los postes de carga. La normalización de sus características y de los sistemas de contadores de consumo para que se homologuen los de todas las empresas con la tarificación de los comercializadores de la energía. Asimismo hay que lograr una interlocución con la red para que se gestione y cobre la demanda. Todo esto debe ir, indica el presidente de la REE, de la mano de la tecnología de la información y en paralelo a los progresos de la industria automovilística. Miguel Ángel Sánchez, director de telecomunicaciones de Iberdrola, asegura que la empresa ya está trabajando en esta normalización: "Estamos en todos los foros con fabricantes europeos y ya se están planteando soluciones. No será difícil llegar a un estándar".

La experiencia internacional puede servir de modelo. Better Place, una compañía con sede en California, se ha convertido en pionera de instalación de infraestructuras para coches eléctricos. El primer proyecto a escala nacional se hará en Israel. Las condiciones son ideales en un país donde la mayoría de los conductores recorren menos de 70 kilómetros al día y la distancia entre las principales ciudades no supera los 150 kilómetros. La alianza Renault-Nissan será la que proveerá de vehículos que podrán cargar la batería en 500.000 puntos de recarga por todo el territorio. El proyecto comenzará en pruebas este año.

En Londres, donde los coches eléctricos tienen incentivos, éstos circulan desde 2006. Los modelos de más éxito son el Smart y el Reva, coches de baja potencia para el centro de la ciudad, donde ya hay una importante red de puntos de recarga. El Ayuntamiento ha establecido una tarifa anual, de alrededor de 400 euros, con la que los usuarios pueden aparcar y recargar sus coches.

En España, el Ministerio de Industria se ha puesto el objetivo de que un millón de vehículos se muevan con energía eléctrica en 2014. Aunque no está claro que la cifra sea viable. Santamarta opina que "el proyecto tiene muy buenas intenciones pero, con las inversiones realizadas, será complicado". El director general de la federación de concesionarios Faconauto, Blas Vives, añade: "Lo que el Gobierno pretende es, hoy por hoy, un sueño. Tal y como está la industria, con unas pérdidas tremendas, es necesario reactivarla primero y no improvisar con ideas nuevas".

Para actuar planificadamente, las compañías eléctricas y automovilísticas se están poniendo las pilas. General Motors e Iberdrola han iniciado un acuerdo para analizar la viabilidad del suministro energético que, si concluye con éxito, pasarán a las Administraciones públicas para pedirles su participación mediante subvenciones o ayudas.

A corto plazo y como experiencia piloto en España, el IDAE presentó en febrero el proyecto Movele. La iniciativa quiere demostrar la viabilidad de los vehículos eléctricos en entornos urbanos y "reducir las incógnitas que puedan surgir y servir de base para la expansión de estas tecnologías a corto y medio plazo". Juan Luis Pla, jefe del departamento de transporte del IDAE, asegura que el plan (que tiene previsto comenzar a hacerse efectivo en abril y mayo) está aún en fase inicial, ya que hay que "trabajar en modificaciones normativas para que se puedan establecer los puntos de carga públicos, por ejemplo, en cabinas telefónicas o parquímetros, y aumentar la potencia eléctrica donde sea necesario, etc., y tomar las decisiones políticas para crear tarifas y establecer procedimientos de cobro. La dificultad va a estar en la distribución, no en el sistema".

España no sólo quiere utilizar el coche eléctrico. Además quiere fabricarlo. El Ministerio de Industria negocia con Renault para establecer la producción de un coche de este tipo en Valladolid. Si la conversación da sus frutos, la planta comenzaría a producir un coche eléctrico de carácter sencillo en 2012.

Paso a paso, la llegada paulatina de los nuevos modelos verdes y la implantación de la red inteligente irán conformando este nuevo panorama. Luis Atienza asegura que estamos ante "un paso de modernización extraordinario, la gran apuesta de la industria energética para la próxima década". Y se aventura con una apuesta: "Al fin de la próxima década será prácticamente imposible entrar en las grandes ciudades con un vehículo que no sea eléctrico".

lunes, 2 de marzo de 2009

La NASA se lanza al espacio profundo en busca de vida extraterrestre

Fuente: 20minutos.

¿Hay vida más allá de la Tierra? La NASA pondrá en marcha esta misma semana una ambiciosa misión para responder esta pregunta cuya respuesta no se sabe si pertenece al campo de las fantasías de ciencia ficción o de la realidad.

Lo más curioso es que que los científicos han descartado virtualmente la posibilidad de que existe algo similar a lo que vemos en nuestro planeta, pero su esperanza por encontrar actividad biológica no decae.

El gran objetivo son los exoplanetas, planetas fuera del Sistema Solar, es decir que giran alrededor de otra estrella que no es el Sol. La nueva misión de la NASA tendrá dónde buscar ya que hasta la fecha se ha confirmado la existencia de más de 320 exoplanetas.

Kepler inicia su viaje

El inicio de está búsqueda, de importancia capital casi mística, se iniciará el próximo viernes cuando el observatorio Kepler despegue, sobre un cohete Delta II, desde Cabo Cañaveral (Florida, EE UU).

"Kepler es un componente crucial de los esfuerzos de la NASA por encontrar y estudiar planetas con características similares a las de la Tierra", señaló Jon Morse, director de astrofísica de la agencia espacial en Washington.

Según el científico, el censo planetario que realice Kepler ayudará a comprender la frecuencia en que existen esos planetas en la Vía Láctea.

También contribuirá en la planificación de otras misiones que, en un futuro a mediano plazo, detecten directamente y transmitan información sobre las características de los mundos que haya en torno a las estrellas vecinas.

Tras un viaje intergaláctico de 3,5 años, Kepler iniciará la búsqueda en la "minúscula" región de Cygnus-Lyra que contiene alrededor de 100.000 estrellas similares a nuestro Sol.

Con sus instrumentos, Kepler determinará la existencia de los exoplanetas a través de los cambios de luz que reflejen sus estrellas cuando pasen entre ellas y el observatorio. Si esas mediciones establecieran su parecido con nuestro globo, su estudio sería continuado por los telescopios Hubble y Spitzer de la NASA, dijo la agencia espacial.

Kepler podrá estudiar las estrellas de manera constante durante toda su misión, algo que no pueden hacer otros observatorios, como el Hubble.

El telescopio más potente

El telescopio de Kepler puede detectar cambios en el brillo de las estrellas de sólo 20 partes por millón y las imágenes que transmitirá el observatorio serán captadas por una cámara que tiene una resolución de 95 megapixels.

"Si Kepler observara un pueblo terrestre durante la noche desde el espacio, podría captar un cambio en la intensidad de la luz causada por una persona que pase frente a un farol", explicó James Fanson, director del proyecto en el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA.

Según Debra Fischer, astrónomo de la Universidad Estatal de San Francisco, una vez que llegue a su destino en la próxima década, el Kepler será un instrumento básico para saber qué tipo de planetas giran en torno a otras estrellas.

Y las estadísticas que se recojan llevarán a determinar el rumbo que deberá seguirse para establecer si efectivamente hay "un planeta de color azul que orbita otra estrella en nuestra galaxia", señaló.

Las tecnologías de la información siguen su imparable expansión

Fuente: El Mundo.

La penetración de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) a nivel mundial sigue imparable, aunque de forma desequilibrada, con 4.000 millones de suscripciones a la telefonía móvil, 1.300 millones a líneas fijas y cerca de un cuarto de la población que utiliza internet.

Así lo revelan los datos publicados hoy por la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), una agencia técnica de la ONU, que recalca que pese al alto crecimiento del sector "persisten grandes diferencias entre regiones y entre países industrializados y en desarrollo".

Según estadísticas de finales de 2008, se ha registrado un claro cambio de tendencia de la telefonía fija a la móvil, con tres veces más de suscripciones de este último tipo con respecto a las líneas tradicionales a nivel mundial, cuyo porcentaje de crecimiento prácticamente se ha estancado en los últimos años.

En el mundo en desarrollo, la expansión de los móviles ha sido exponencial y ya representan dos tercios del total de la telefonía, frente a menos de la mitad en 2002.

Por zonas, África es el área en desarrollo con el mayor crecimiento de la telefonía móvil (32% entre 2006 y 2007).

En el 2001 sólo una persona de cada cincuenta tenía un móvil, mientras que actualmente es un veintiocho por ciento 28% de la población.

En Asia la penetración de los móviles es del 38%; del 72% en América y del 111% en Europa.

Sobre Internet, el estudio de la UIT señala que 23 de cada 100 personas en el mundo utilizan la red, aunque los niveles de uso pasan de ser muy altos en los países ricos a extremadamente bajos en los de bajos ingresos.

En este ámbito, la llamada "brecha digital" es muy clara, pues mientras los usuarios de esa tecnología en Europa y América son el 43 y el 44% de la población, respectivamente, en Asia es cerca del 15% y en África es menos del 5%.

Con estos datos, los expertos del UIT elaboraron un índice de desarrollo en el ámbito de las TIC, que compara información de 154 países en el periodo 2002-2007 y combina indicadores como el número de hogares que cuentan con un ordenador o los usuarios de internet, entre otros.

Todos los países a la cabeza son del norte de Europa, con la excepción de Corea del Sur que está en segunda posición.

Suecia lidera el índice, Dinamarca ocupa el tercer lugar y le siguen Holanda, Islandia, Noruega, Luxemburgo, Suiza, Finlandia y Reino Unido.

El estudio deja clara la relación entre la expansión de las TIC y el nivel de ingreso, pero también revela que varios países en desarrollo -como Pakistán, China y Vietnam- han avanzado considerablemente en ese sector, particularmente por la multiplicación de usuarios de líneas de móviles.

Asimismo, sostiene que "la magnitud de la brecha digital global se mantuvo inalterable entre 2002 y 2007", a pesar de los cambios significativos en el mundo en desarrollo, lo que se asocia a los costes que tienen esas tecnologías.

En 2008, las tarifas de las TIC corresponden en promedio al 15% de los ingresos per cápita de los países, pero con grandes diferencias entre los pobres y ricos.

Para los habitantes del mundo industrializado ese costo representa sólo el 1,6% de sus ingresos, mientras que en los de menores ingresos puede suponer el 20%.

A ello se suma que "los países con altos niveles de ingresos pagan relativamente poco por la telefonía fija, móvil o el acceso a internet, mientras que los más pobres pagan relativamente más, frecuentemente por los altos precios de la banda ancha".

Sabremos de qué está hecho un pensamiento

Fuente: Publico.

Hace 20 años, Hongkun Park (Seul, Corea del Sur, 1967) hacía guardia en una garita en la frontera entre las dos Coreas, poco antes de que ambos países firmaran un pacto de no agresión. Iba armado con un fusil de asalto y vestía uniforme de camuflaje, pero, según dice, ya era un geek, un friqui de la tecnología. En la actualidad su trabajo parece mucho más provechoso. Park cambió en seguida el color caqui por el blanco de su bata de laboratorio.

En el departamento de Química de la Universidad de Harvard (EEUU), el científico coreano ha fabricado transistores el elemento fundamental de ordenadores, radios, televisores y reproductores de mp3 con una simple molécula. Y su objetivo final pone los pelos de punta. Park y su equipo están desarrollando nanoelectrodos, dispositivos con un grosor decenas de miles de veces más pequeño que el de un cabello, para implantarlos en cerebros animales y conocer los ingredientes básicos de un pensamiento o un recuerdo. La receta del alma. El químico estuvo recientemente en Madrid invitado por la Fundación BBVA.

¿Qué preguntas quiere responder con su investigación?

Básicamente, queremos aprender cómo funciona el cerebro. La ciencia sabe mucho sobre neuronas individuales y sabe algo sobre cómo funciona el cerebro como un todo, qué funciones tiene cada una de sus partes. Pero no tiene ni idea de cómo se conectan las neuronas para componer un cerebro. La razón es que los investigadores no disponemos de una herramienta para hablar con las neuronas. No sabemos cómo se propagan las señales de una neurona a otra y consiguen llevar a cabo una función. Lo que intentamos hacer nosotros es desarrollar nuevas herramientas que nos permitan charlar con las neuronas y escuchar sus conversaciones. En una etapa final, desarrollaremos un chip que podrá ser implantado directamente en cerebros animales para aprender cómo funciona un cerebro.

¿Serán capaces de saber de qué está hecho un pensamiento o un recuerdo?

Es nuestro objetivo, y estamos dando pasos para conseguirlo.

¿Se podría utilizar un dispositivo nanoelectrónico para controlar un cerebro?

Sí, posiblemente. Pero para controlar un cerebro, primero debes saber cómo funciona.

"No trabajaría con el Ejército sí sé que mi contribución se puede usar para matar"

En el futuro, ¿llegarán a controlar a una persona o a una vaca con esta tecnología?

Ya veremos, pero creo que será posible. De hecho, ya se pueden controlar funciones elementales del cerebro de una rata. Hace unos años, unos investigadores publicaron en Science que habían implantado unos electrodos en el cerebro de una rata y habían conseguido que el animal se desplazara hacia la derecha o la izquierda, según sus órdenes. Este tipo de controles sencillos son posibles, pero todavía no somos capaces de dirigir tareas más complejas, porque no sabemos cómo funciona el cerebro. Creo que llegaremos mucho más lejos.

Hay científicos que opinan que será posible grabar los recuerdos y pensamientos de una persona e implantarlos en otro cuerpo.

Posiblemente, pero todavía es ciencia ficción, obviamente. En la etapa final de la investigación, quién sabe, pero primero, repito, tenemos que saber cómo funciona el cerebro.

Usted es uno de los científicos que lograron fabricar el primer transistor con una sola molécula. ¿Cuáles son sus aplicaciones?

Fue, fundamentalmente, la demostración de que se podía hacer un transistor compuesto por una simple molécula. Es la miniaturización límite de un transistor. Los chips de silicio son cada vez mejores, ya existen algunos de 35 nanómetros. Y hemos demostrado que se puede llegar al nivel molecular y se puede optimizar el funcionamiento de los dispositivos.

¿Cómo será el iPod del futuro, con estos avances?

En vez de almacenar miles de canciones, se podrá almacenar todo el cine de la Historia o toda la vida, quién sabe.

¿Necesitamos un iPod con 300 millones de canciones?

Mi iPhone posee 16 gigabytes de memoria. Puede almacenar cinco horas de cine. Parece mucho, pero no lo es, especialmente si las películas son en alta definición. Si tienes varios terabytes, tienes miles de veces más memoria que en la actualidad, y puedes llevar contigo muchísima información, no sólo canciones, sino películas. Posiblemente, los iPod podrán reproducir 300.000 canciones seguidas, sin que se repita ninguna.

Harán falta buenas baterías.

Sí, este es un campo de investigación muy interesante ahora mismo. Hay mucha gente trabajando en el desarrollo de baterías.

¿Cuándo veremos componentes electrónicos de una sola molécula?

De momento, no. Toda la industria de chips de silicio tendría que cambiar de arquitectura y de materiales, adoptar otros completamente diferentes, y eso lleva tiempo. Si para construir una fábrica de chips de silicio has invertido miles de millones de euros, no la vas a cambiar de la noche de la mañana. Pero las empresas no tardarán mucho tiempo.

¿El ser humano es, simplemente, un conjunto de reacciones químicas?

Es una pregunta demasiado metafísica. No sé si la ciencia tiene la respuesta.

Pero, en su investigación, sólo pueden encontrar procesos químicos...

Hay muchos científicos que piensan así. Y es verdad, en esencia, somos simplemente seres químicos, pero me gusta pensar que somos algo más. Quizá sólo sea esperanza, es una pregunta muy difícil. Tendría que preguntarle al Papa primero.

Estuvo un año en el servicio militar en Corea del Sur. ¿Cómo fue la experiencia? ¿Qué aplicaciones militares promete la nanotecnología?

Me cuesta pensar que fui un militar destinado en la frontera, pero sí. La nanotecnología tiene varias aplicaciones militares. Colaboro con el Departamento de Defensa de EEUU, para pensar nuevas tecnologías.

¿Puede dar algún detalle?

Si se lo dijera, me matarían. No, es broma. Sobre todo se interesan por nuevos sistemas de detección. Cuando envías soldados a un campo de batalla, hay que saber a qué riesgos se van a enfrentar. Buscan tecnología, pero son generalidades, como aplicaciones en el ámbito de las telecomunicaciones, nada de extravagancias.

¿Tiene problemas éticos, colaborando con el Ejército?

Yo no trabajaría con el Ejército si sé que mi contribución se puede utilizar para matar a alguien.

¿Quizá un ejército de ciborgs controlados con nanoelectrodos?

Eso sí que es ciencia ficción.

La isla de Pascua y el colapso global

Fuente: El Pais.

Después de impartir una charla sobre la soberanía alimentaria, una de las salidas a la crisis sistémica que nos afecta, he leído con detenimiento el excelente artículo La isla de Pascua y el colapso global, de Enrique Gil Calvo.

En nuestro debate hemos planteado respuestas muy similares a la crisis. Dice el señor Gil que hay cuatro escenarios, una salida de más regularización light sin modificar el sistema de mercado, un proteccionismo llevado a extremos no aceptables, una vía revolucionaria violenta, y la opción esperanzadora de un nuevo modelo de sociedad.

A mi entender, faltaría una quinta que integraría las dos últimas. Alcanzar ese nuevo modelo de sociedad debe pasar por una revolución social y política, no violenta desde luego, ni de luchas entre clanes competidores como en la isla de Pascua. Pero se requiere de una movilización que recupere para la sociedad los espacios políticos que le han sido arrebatados. Y eso pasa por un enfrentamiento pacífico e imaginativo contra los actores que negocian con el planeta y sus seres vivos.

A saber: el capital que especula con alimentos o tierras cultivables, las empresas que monopolizan y patentan el mercado de semillas, las corporaciones que impulsan los agrocombustibles, las multinacionales que devoran los recursos pesqueros llevándonos al colapso del ecosistema marino, el sector alimentario de la soja que empieza envenenando los campos y a los campesinos con insecticidas y culmina en las cadenas del fast food basura, empresas de refrescos que usurpan agua de países del Sur, empresas de telecomunicaciones que se nutren del coltán que fabrica guerras, las grandes cadenas de distribución que amarran a los pequeños productores hasta su asfixia...

Y frente a aquellos poderes que hacen posibles estas injusticias. A saber: la OMC, el FMI, el Banco Mundial, la mentira de la deuda externa, el dumping de EE UU y la UE, los tratados de libre comercio... Una lucha revolucionaria para construir.