La primera insulina inhalada no inyectable para el tratamiento de la diabetes ya está a disposición de los pacientes y profesionales sanitarios españoles desde esta misma semana, por parte de la compañía biomédica Pfizer.
Se trata de la forma de administración más innovadora desde el descubrimiento de la insulina hace 80 años, que permitirá a miles de pacientes controlar su diabetes sin tener que recurrir a los pinchazos o reduciendo el número de éstos.
Esta nueva presentación de la insulina, tan eficaz y segura como la insulina subcutánea, viene avalada por numerosos estudios clínicos realizados en más de 2.500 pacientes de diabetes tipo 1 y tipo 2 y además, presenta una doble innovación. Por un lado, una formulación en polvo seco de acción rápida de insulina humana, que se absorbe a nivel pulmonar y que se inhala por la boca antes de las comidas. Y por otro, el inhalador, que está diseñado especialmente para administrar la insulina de manera óptima a través de los pulmones mediante la inhalación oral.
La diabetes es una enfermedad que actualmente afecta a dos millones y medio de personas en España, de los que un 10% son diabéticos tipo 1 y un 90%, tipo 2. Para el doctor Juan Álvarez, director médico de Pfizer en España, “la insulina inhalada como método mínimamente invasivo para la administración de insulina representa una valiosa alternativa terapéutica a considerar, tanto en pacientes tipo 1 como en pacientes tipo 2 que necesiten insulinoterapia”.
Según la doctora Susana Monereo, Jefa de servicio de endocrinología y nutrición del Hospital Universitario de Getafe, “la insulina inhalada supondrá un mayor control para los pacientes, que ya no tendrán excusas para administrarse la insulina cuando sean diagnosticados”. En definitiva “se abre un nuevo horizonte en el que se amplían las posibilidades para el tratamiento de esta enfermedad”, añade Monereo.
La insulina humana inhalada es el resultado de uno de los programas de desarrollo clínico más riguroso e innovador que se han llevado a cabo en el campo de la diabetes. “Con esta nueva insulina, los pacientes tienen otra oportunidad de conseguir controlar su glucemia, es decir, su nivel de azúcar en sangre, así como de tomar un papel activo en el manejo de esta complicada enfermedad” afirma Álvarez.
Calidad de vida de los pacientes
Según el estudio publicado en la revista Diabetes Care, la insulina inhalada supone una mejora en la calidad de vida de los pacientes y facilita el acceso al tratamiento para aquellas personas reticentes al mismo. De hecho, las personas que participaron en el estudio apreciaron una reducción significativa en la sensación de fatiga, y de sobrepeso, entre otros aspectos, durante el empleo de la insulina inhalada. El nivel general de satisfacción tras el tratamiento con insulina inhalada alcanzó una puntuación del 76.4% frente al 65.8% señalado por los pacientes en tratamiento con insulina subcutánea.
Además, la predisposición de los pacientes a iniciar un tratamiento con insulina es mayor cuando cuentan con insulina inhalada como una de las opciones terapéuticas (Freemante, 2005)2. También se ha comprobado que la mayor satisfacción con el tratamiento con insulina inhalada, en comparación con la terapia exclusivamente inyectable, puede aumentar el cumplimiento terapéutico y permitir, en consecuencia, un control mantenido del nivel de glucosa en sangre (Dunn, 2006)3.
En definitiva, la insulina inhalada representa un avance para los pacientes con diabetes tipo 1 y tipo 2 que retrasan, incumplen o no intensifican el tratamiento con insulina inyectada. En opinión de Ángel Cabrera, presidente de la Federación de Asociaciones de Diabéticos de la Comunidad de Madrid, “la insulina inhalada va a contribuir a mejorar la calidad de vida de muchos de nosotros y nos permitirá tener una mayor autonomía, que a día de hoy tenemos limitada con los pinchazos”.
En palabras de la doctora Monereo, la aparición de la insulina inhalada en España “es una excelente noticia tanto a nivel clínico como científico, por el hecho de ser capaces de administrar insulina sin necesitar agujas. Los especialistas podrán ahora asumir nuevos retos, al no existir el miedo de los pacientes a inyectarse, la única manera posible de administrar insulina hasta la fecha”. “Pero sobre todo, es una apuesta clara por la mejora en la calidad de vida de los pacientes con diabetes”, concluye esta experta.
El inhalador, diseñado para aportar la dosis precisa y exacta de insulina cada vez que se utiliza, es extensible y está compuesto por una cámara transparente y un mecanismo especial que contiene un sistema de liberación de insulina que permite la formación de una nube visible de esta sustancia. “Los pacientes inhalan esta nube a través de una inspiración- explica el director médico de Pfizer- y pueden verla desaparecer de la cámara, por lo que tienen la seguridad de que la dosis correcta ha sido administrada”.
Fuente: HispaMp3.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario